viernes, 26 de octubre de 2007

Cinema Verité

Algo que realmente sorprende es cuando una canción actúa como si fuera un radio teatro. Cuando se transforma en un relato que te ubica en tiempo, espacio, te permita imaginar los actores, la situación. Todo eso tiene esta canción que integra Peperina. Y encima la crítica al snobismo y alardeo de los "pobres millonarios". Como siempre, Charly tiene esa "pobre antena que le transmite lo que vivir", captando lo que otros quizas no ven, y plasmándolo como pocos, porque él nació para mirar lo que pocos pueden ver.


Anteojos negros de carey,
auriculares en la sien,
no me escucha, no me ve.
Y yo puedo observar tranquilo.

La playa como un ajedrez,
el tipo del Mercedes Benz
que está tirado ahí no más,
tiene sólo una cosa en mente:

Sólo una chica tonta más bajo el sol,
como una propaganda de bronceador.

Él sabe como impresionar
caminando como Tarzán.
Él es Eva y ella Adán
y yo estoy en cualquier planeta.

Presiento que algo va a pasar.
Las plumas del pavo real
oscurecen hasta el sol,
y él se siente el Rey de la selva.

Y yo estoy con la máquina de mirar
justo en el paraíso para filmar.

Yo puedo compaginar la inocencia con la piel,
yo puedo compaginar...
Yo nací para mirar lo que pocos pueden ver,
yo nací para mirar,
...mirá!

Ahora él le ofrece una manzana...
Ahora le insiste de probar...
Ahora estimula sus membranas
por la hot line.

En escenarios solitarios
la gente se abre un poco más,
y hasta dos pobres millonarios
se pueden encontrar.

Cayeron los auriculares
y los anteojos de carey.
La luna baja los telones,
es de noche otra vez.

2 comentarios:

Ivana Carina dijo...

Este Charly... eso de la chica tonta que parece una propaganda de bronceador me mató jaja!!
Y que camina como Tarzán!!!
Mi vieja tenía anteojos de carey...
En fin..., me encantó!!!
Saluditosss y besiñosss...
P/D: Me dió pena esta canción solita sin comentarios...

Anónimo dijo...

Que buena letra!
Muy bueno el blog!

Mucho se habla de la capacidad compositiva musical de Charly. Aca hablamos de su capacidad para escribir los versos más conmovedores, más románticos, más comprometidos, más satíricos y mas irónicos de la música en castellano.